Un estudio revela que los bebés amamantados se comportan mejor.
La leche materna contiene ácidos grasos esenciales para el desarrollo del cerebro y el sistema nervioso central de los niños.
Los bebés que son amamantados durante al menos cuatro meses después de nacer son menos propensos a tener problemas de comportamiento que aquellos alimentados con leche artificial, según un estudio llevado a cabo por distintas de universidades del Reino Unido.
En la investigación, publicada en el diario médico Archives of Disease in Childhood, participaron más de 10.000 bebés de origen británico nacidos entre el año 2000 y 2001. A través de entrevistas periódicas a sus padres, los investigadores estudiaron las tendencias en el comportamiento de los niños durante los últimos años, con diferentes preguntas sobre conflictos emocionales, como la ansiedad y la hiperactividad, y problemas de conducta, como mentir o robar.
Los resultados del estudio revelan que sólo un 4% de los niños que habían sido amamantados presentaban problemas de comportamiento, frente al 16%, alimentados con leche artificial. Las causas de estas diferencias no están del todo claras, pero los autores indican que podría deberse a los componentes de la leche materna, que «contiene altas cantidades de ácidos grasos esenciales que juegan un importante papel en el desarrollo del cerebro y del sistema nervioso central de los niños». Otra razón, algo más psicológica, es que amamantar «lleva a madre e hijo a interactuar, a aprender actitudes aceptables y tener menores problemas de comportamiento».
EFE - 9/5/2011