Seis preguntas
clave para salir vivo de una cirugía
Una lista de seis
preguntas puede salvar cientos de miles de vidas.
Una simple
revisión, como verificar que en la mesa de operaciones está el paciente
correcto o que se va a operar en la parte del cuerpo que lo requiere, podría
ayudar a los equipos de cirugía a salvar la vida de casi medio millón de
personas en todo el mundo.
Hay pacientes que
han muerto después de que sus cirujanos han retirado el órgano equivocado,
dejado instrumentos en el cuerpo e incluso operado la persona que no era.
En 2008, la Organización Mundial de la Salud lanzó una lista de seguridad quirúrgica (Surgical Safety Checklist) para evitar errores humanos como estos. Estudios posteriores demostraron que era tan efectiva en reducir las complicaciones que muchos hospitales la acogieron con rapidez.
A pesar que esta
lista fue desarrollada como una herramienta global, no ha tenido tanto éxito en
los países más pobres.
Pero, ¿cuáles son
esas preguntas que podrían salvar tu vida?
1.- ¿Estás
operando al paciente que es?
Por increíble que suene, los cirujanos no siempre
operan al paciente correcto. Sólo en Estados Unidos se estima que cada año se
hacen entre 200 y 300 intervenciones a la persona equivocada.
Asegurarse de
quién es la persona en la mesa de operaciones es tan crucial que en la lista
aparece dos veces: la primera justo antes de que le colocan la anestesia al
paciente y la segunda justo antes de que le hagan la incisión.
Recientemente, un
hospital en el Reino Unido realizó una operación en el ojo al paciente que no
era, a pesar de que la lista de comprobaciones es obligatoria en ese país desde
2010.
No se trata de
tener la lista a la mano. De acuerdo con el doctor Iain Wilson, anestesista
involucrado en la elaboración de la lista, las preguntas parecen simples pero
usarla de forma correcta significa pensar bien en cada paso.
2.- ¿Estás
haciendo la operación correcta?
Antes de hacer la
primera incisión, el equipo debe preguntarse no una, sino dos veces si es el
paciente correcto y si es en el área del cuerpo que es.
Esta también está
dos veces en la lista.
Las cirugías en
la zona equivocada del cuerpo son más comunes cuando se trata de ver si es del
lado derecho o izquierdo.
En el caso de un
hombre que murió cuando le quitaron el único riñón sano, el cirujano dijo que
había estudiado los rayos X al revés antes de la operación.
En Ruanda, donde
son muy pocos los hospitales que utilizan esta lista, un anciano se sometió a
una operación de su cadera derecha fracturada. Pero cuando se despertó, le
notificaron que el tornillo se lo habían puesto del otro lado, por lo que
tenían que empezar de cero al día siguiente.
3.- ¿Te sabes el
nombre y ocupación de todos en el equipo?
Esto es algo a lo que se puede negar
el equipo de cirujanos si están bajo presión de tiempo: ¿por qué necesitamos
presentarnos los unos a los otros?
Pero estas
presentaciones no sólo permiten saber el papel de cada uno en la operación,
sino que motivan a las personas a hablar más tarde en la operación, explica la
anestesista pediátrica Isabeau Walker.
"Siempre hay
alguien que ha notado algo que no está del todo bien. Si esa persona se ha
presentado, tendrá voz y se inclinará más a hablar".
4.- ¿Se ha
revisado la máquina de la anestesia?
Anestesista al frente de un monitor
La revisión de
los aparatos quirúrgicos puede reducir considerablemente el número de muertes.
A pesar de que repasar la lista sólo toma unos minutos, se refiere a inspecciones que deberían haberse hecho, como revisar que todos los aparatos estén a punto.
Esto es
especialmente importante en países en desarrollo donde se estima que el 40% de
los equipos sanitarios no funcionan, comparado con el 1% de las máquinas en los
países más ricos.
Las técnicas
modernas y los monitores han permitido que las muertes por anestesia bajen a 1
por cada 200.000 pacientes en el mundo desarrollado.
Pero en Togo, el
riesgo de mortalidad por anestesia es tan alto como de 1 por cada 133, según un
estudio de 2005. Y se considera que la gran mayoría de esas muertes se pueden
evitar.
5.- ¿Se está
monitoreando los niveles de oxígeno del paciente?
Los niveles de oxígeno en la
sangre del paciente se pueden monitorear con un oxímetro de pulso, un
dispositivo que se coloca en el dedo o en el lóbulo de la oreja y que hace
sonar una alarma cuando los niveles están bajos.
Si bien este es
un aparato de seguridad ampliamente usado en el llamado mundo occidental, el
70% de las operaciones en las salas de operaciones del África sub sahariana no
lo tiene.
Es el único punto
de la lista que se refiere a una nueva tecnología que no se usa ampliamente en
todo el mundo.
Para solucionar
esta falta de oxímetro de pulso, existen fundaciones, como la Lifebox que los
distribuye a un precio más barato o los dona en países de bajos recursos.
6.- ¿Has retirado
todo el material quirúrgico del paciente?
En las operaciones
se lleva un inventario del material quirúrgico que al final debe coincidir con
la lista inicial.
Una mujer en
Uganda murió cuando una gasa fue dejada en su cuerpo después de que le
practicaran una cesárea. Las gasas se usan con frecuencia en hospitales de bajo
recurso donde no hay succionadores.
Cuando se
descubrió el error, la gasa estaba completamente incrustada en los intestinos
de la mujer.
Existen tres
etapas en la lista: "registrarse", comprobaciones que se hacen antes
de que el paciente tenga la anestesia; "tiempo", antes de que se haga
la primera incisión; y "salirse", antes de que el paciente salga de
la sala de operaciones.
Una de las últimas
revisiones antes de que el paciente abandone la sala es un conteo completo de
todos los instrumentos, esponjas y agujas, para asegurar que esos errores de
vida o muerte no ocurran.
Cathy Edwards - BBC - Miércoles, 17 de julio de 2013